Se trata de un enorme friso lleno de altorrelieves, donde la influencia oriental se aprecia en el colosalismo (son relieves de 2,3 metros de altura) y con una enorme teatralidad conseguida mediante el dinamismo, el movimiento, la emoción, la gestualidad y el dramatismo.
La Escuela de Rodas opta por representar anatomías de niños y ancianos (que contrastan con los cuerpos atléticos de época clásica) como por ejemplo el Niño de la Oca. También pone el acento en la tendencia barroquizante con dos obras básicas:
La Escuela de Rodas opta por representar anatomías de niños y ancianos (que contrastan con los cuerpos atléticos de época clásica) como por ejemplo el Niño de la Oca. También pone el acento en la tendencia barroquizante con dos obras básicas: